Gobierno de Evo informó que no sabe quién ordenó al acoso a brasileños en la frontera.

El gobierno boliviano negó que, en abril pasado, haya ordenado los ataques a los brasileños que viven en la frontera entre los dos países, según el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.

“Lo que nos dijeron es que la orden no fue dada por La Paz y las autoridades investigan quién tomó la determinación de atacar”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Tovar Nunes, citado por la Agencia Brasil.

Según el Ministerio, aproximadamente 300 ciudadanos brasileños dijeron haber sido presionados por los militares para salir de Bolivia y pasar al estado de Acre.

El desacuerdo comenzó en 2006 con una ley boliviana que prohíbe la presencia de extranjeros en el país en un rango de menos de 50 kilómetros de la frontera.

El 30 de abril, el Ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Antonio Patriota, dijo que el asunto se había convertido en una prioridad para el gobierno de Bolivia, que continúa investigando la causa de los ataques.

Como consecuencia de ese informe, las autoridades brasileñas mantienen el estado de alerta sobre los casos de abuso, la invasión de viviendas, la muerte del ganado y las expulsiones que se produjeron el mes pasado, frente a los brasileños que viven en la frontera con Bolivia.

A finales de abril, el diplomático Eduardo Saboya, acompañado por policías federales y miembros del gobierno de Acre, fue a la ciudad de Espirito Santo, 77 kilómetros de Río Branco, la capital de Acre, y el lugar donde viven los brasileños, que dijeron que había sido acosados.

FONTE: La Redacción de Oxígeno